Retumba la voz del capataz en la noche procesional, es la voz que da inicio al paso que la va a llevar a ella por largas calles anchas, estrechas y angostas.

Anteriormente la voz del presidente, ha mandado preparar las mejores galas, que se limpien ornamentos, que se pongan las mejores luces y se busquen las flores más bellas.

Sigue la noche procesional, se oye la voz del capataz, una voz para ordenar, una para corregir y una para animar.

Mientras el mando presidencial la va contemplando con ojos lagrimosos al vaivén que lleva ella al paso de los costaleros, en su mente solo unas palabras… que bella va ella.

Pero de repente ya no se oye la voz del capataz, no manda órdenes el presidente, solo silencio……… silencio.